La frase que no se puede olvidar de repetir para que las pequeñas hadas no dejen de existir, " Yo creo en las hadas... yo creo... si creo...", es importante no dejar crecer al niño que todos llevamos dentro.
La intrépida Campanilla es la protagonista de la entrada de hoy.
La misma Lola eligió el diseño de la tarta, la vio, le gustó y a mandar se ha dicho.
El relleno de ganaché de chocolate negro y de blanco con fresa, con almibar de fresa y cubierta de buttercream.
En pleno mes de mayo, entre galleta y galleta de Comunión, y mi primera tarta después de una operación cervical, tuve que hacer este maravilloso encargo.
El diseño de la tarta lo saqué de la carátula de la peli de Campanilla, las bolsitas de chuches, las de lazo rosa para las niñas iba Campanilla, y las de lazo amarillo Peter Pan para los niños.
El relleno de crema y choco, cosa sencilla para los peques, y la confesión de la tía de Alba fue que estaba deliciosa.
Bella y Bestia son!!!, jaja, en este caso sólo Bella, espero que algún día le llegue su Bestia.
Rocío hacía una fiesta de princesas para su cumple y su mami decidió encargármela de Bella.
El fondo en nácar lo hice con un stencil que compré en Karen´s Cookies, pero lo venden también en tiendas de repostería en España, lo que rodea a Bella está hecho con glasa.
El relleno para los peques de nata y chocolate.
Esta ha sido mi entrada de hoy después de largo fin de semana, espero que os guste.
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